Cada vez es más difícil para las empresas atraer recursos humanos calificados y que permanezcan motivados. El talento en los profesionales es un recurso escaso, que hay que saber buscar, captar y, sin duda, retener. Definitivamente, serán los colaboradores con más potencial, los que ofrecerán a las organizaciones las mayores ventajas competitivas para ser rentables. Por eso no debemos permitirnos perderlos.
Hay un factor que
identifica que los recursos humanos claves suelen tener, en muchos casos,
elevados índices de rotación y vayan cambiando de empleo de acuerdo a
oportunidades más atractivas. Por eso entre las claves más destacadas se
encuentra que las personas buscan quedarse en empresas que le brinden
oportunidades de desarrollo, con lo cual disminuyen las posibilidades de perder
al personal clave.
Actualmente, los
Gerentes y Directores de RRHH, tienen como prioridad en sus agendas de
actividades la difícil tarea de atraer, contratar y mantener motivados a los
talentos.
Veamos las 10
claves para lograrlo:
1. Crear una marca fundacional: una de las
claves para captar, motivar y retener el talento, consiste en construir una
“marca” que destaque la buena reputación de la compañía como empleadora. Es
importante para lograrlo que la cultura organizacional sea un diferencial con
el resto, y mantener una coherencia entre la imagen externa y la interna,
fomentando valores en común y un consistente sentido de pertenencia.
2. Crear un clima laboral estimulante: el
ambiente de trabajo es un pilar trascendental y decisivo al momento en que los
empleados resuelvan irse o no de la empresa. Las personas necesitan
desarrollarse en un contexto en el que puedan entablar relaciones sociales y a
la vez, lograr sus objetivos profesionales.
3. Desarrollar la carrera del personal: Una de las
mayores causas de salida de un empleado es el estancamiento laboral, o la
imposibilidad de ascender en la pirámide organizacional. Es importante que el
personal clave, tenga en claro las posibilidades de desarrollo de carrera y la
empresa lo acompañe, garantizándoles que tendrán la posibilidad efectiva de
alcanzar nuevas responsabilidades.
4. Incentivar de manera personalizada: Sin duda,
un buen estímulo para el empleado es la compensación. Pero, según afirman los
expertos, no basta con esta esté acorde a las referencias del mercado. Lo
importante, dicen, es que el incentivo sea personalizado, y de acuerdo a las
necesidades y preferencias de cada trabajador, ya que no todos tienen las
mismas motivaciones. Es importante que se reconozcan sus logros, ya sea en
términos de remuneración salarial o bien verbalmente, expresando frases como
“en la empresa, estamos orgullosos de que trabaje con nosotros”.
5. Lograr retos: Permitir
que los empleados se sientan parte de los logros organizacionales como de los
individuales.
6. Optimizar la comunicación: Un
empleado se sentirá integrado en la medida en que advierta que sus ideas,
opiniones y sugerencias son tomadas en consideración. De este modo, considerará
que tiene un lugar de pertenencia y que puede colaborar de forma activa en el
logro de los objetivos organizacionales.
7. Facilitar el Aprendizaje en la organización: Los
empleados talentosos requieren de constantes retos para progresar. Por ello,
las capacitaciones en diversas áreas son las instancias precisas que ellos
requieren para sentir que evolucionan y crecen profesionalmente. Hay que tener
en cuenta que los empleados que buscan mantenerse y crecer dentro de una
compañía, deberán contar con capacitación constante.
8. Crear una cultura de confianza: la
confianza, una entidad informal que incide sobre el comportamiento de los
individuos y las organizaciones admite intervenir en las relaciones
conflictivas y facilita la asociatividad. Se puede lograr una mayor
productividad en un ambiente donde prime confianza mutua dentro de la compañía
9. Fomentar sociabilidad: Establecer
como prioritario el trabajo en equipo e impulsar la convivencia entre sus
integrantes, permite crear lazos de afectividad, seguridad, lealtad y confianza
hacia la organización. El buen ambiente en la oficina mejora el desempeño del
empleado y disminuye el estrés al que se encuentra sometido habitualmente.
10. Balancear entre la vida laboral y familiar: Retener a
los empleados, otorgándoles una mayor flexibilidad horaria, es otra de las
recomendaciones que hacen los especialistas. Un ejemplo es el llamado home
office, que permite trabajar desde la propia casa. Otra alternativa es permitir
a los empleados asistir a los programas escolares de sus hijos, brindar
beneficios de guarderías para niños, y una política salud ocupacional. Con
acciones en este sentido, se acrecentará el compromiso y los empleados tendrán
un balance más equilibrado entre el trabajo y su vida personal.
Fuente: Puntual.com.ar por Veronica Dobronich